Estimados lectores, se acaba de producir la noticia destacada en España. El Presidente de la República, a título de Rey, Juan Carlos de Borbón acaba de presentar su dimisión, dejando el cargo a su hijo, Felipe de Borbón.
A algunos les sonará raro el título del comentario, pero para que a una persona se le pueda respetar el título de Rey de España, tiene, al menos, que ser merecedor del mismo. Y, durante toda su trayectoria, una persona que ha accedido al trono por imposición de Franco; que aún no tiene clara su participación en un golpe de Estado (para fortalecer su imagen en aquella época, seguramente); que tiene un yerno imputado por corrupción, y a su hija, si no está imputada es por ser, directamente una ignorante; que se ha dedicado a las cacerías durante una de las crisis económicas más fuertes que ha sufrido nuestro país; que dimite en su hijo, casado con una divorciada abortista anticatólica; que ha tenido numerosas y conocidas amantes; que ha ratificado leyes como las del aborto, divorcio, matrimonio homosexual, ....... y un largo etcétera, pues, no se le puede considerar Rey de España.
A lo largo de estos días, con más calma y tiempo, iremos haciendo un repaso a la funesta trayectoria de esta persona en la jefatura del Estado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario